Hasta Aireana, grupo por los derechos de las lesbianas, llegan diversos casos de denuncias de violencias contra lesbianas. Diversos en los tipos de violencia, en los lugares de origen, en la forma en la que la sociedad intenta desaparecer nuestros derechos.
Uno de los casos que atendimos fue el de nuestra compañera de la Tatucada: el 7 de febrero Deisy Aguilera, integrante de la batucada de la organización, fue encontrada muerta en su departamento. La fiscala puso en su carátula “a determinar” porque no era obvio que fuera un suicidio. Pasaron los meses y no se supo nada más. Aireana solicitó un pedido de informe a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), la CIDH exigió la información a la fiscalía sobre el caso. Pasaron los meses y solo se sabe que murió intoxicada. La única certeza es que, suicido o no, la discriminación la mató.
[ssba-buttons]